Al martes siguiente empecé... A la mañana no estaba nerviosa, solamente que revise 800 mil veces las cosas para saber si me faltaba algo. Al llegar al jardín es como que algo sentí en el estómago, nervios no eran, estaba demasiado tranquila, para mí era orgullo, emoción por sentirme en el lugar de maestra de esa sala. Esa clase realmente salió muy bien para mi punto de vista, pasó demasiado rápido.
Al día siguiente ya fui con mayor relajación, nunca sentí nervios en verdad no se como explicar esa sensación hermosa que sentía dentro mio; esa sensación de verdaderamente sentirme maestra jardinera de esa tercera sección.
Me fueron a observar, pero para mi fue como si en la sala estuvieran los nenes, las señoritas y mi compañera. Los nenes se engancharon con el cuento y se notó que los atrapó la historia, por la facilidad con la que re-narraron y sin la ayuda de las imágenes.
El jueves pase por un momento para mi "único". La docente faltó y tuve que hacerme cargo yo de la clase, de todo. Ahí si que realmente vi como los niños me respetaban y me veían a mi como su maestra en ese momento. Era una situación que me generó una gran felicidad para mi, el fin de la hora; el día se había terminado y transcurrido sin ningún inconveniente. Para mi, fue la prueba de fuego; si los nenes habían podido estar sólo conmigo y todo había salido bien, las clases siguientes creí que serían similares.
El día viernes muchas actividades no pude hacer, pero si realicé la experiencia directa a la "Librería Recreo", que era la actividad disparadora para luego comenzar a trabajar con este negocio. La visita realmente fue muy linda, los niños se entretuvieron, pudieron observar todo lo que había allí y preguntar, y además escucharon un cuento que les narró Emilce... Este fue un día maravilloso, los pequeños se mostraron con mucho interés de aprender, estaban muy atentos a lo que les contaban... No tuve ningún problema, los chicos se portaron de mil maravillas... Llegamos al jardín, y enseguida formamos para irnos a casa...
Así, transcurrió mi primera semana de práctica...
Me fueron a observar, pero para mi fue como si en la sala estuvieran los nenes, las señoritas y mi compañera. Los nenes se engancharon con el cuento y se notó que los atrapó la historia, por la facilidad con la que re-narraron y sin la ayuda de las imágenes.
El jueves pase por un momento para mi "único". La docente faltó y tuve que hacerme cargo yo de la clase, de todo. Ahí si que realmente vi como los niños me respetaban y me veían a mi como su maestra en ese momento. Era una situación que me generó una gran felicidad para mi, el fin de la hora; el día se había terminado y transcurrido sin ningún inconveniente. Para mi, fue la prueba de fuego; si los nenes habían podido estar sólo conmigo y todo había salido bien, las clases siguientes creí que serían similares.
El día viernes muchas actividades no pude hacer, pero si realicé la experiencia directa a la "Librería Recreo", que era la actividad disparadora para luego comenzar a trabajar con este negocio. La visita realmente fue muy linda, los niños se entretuvieron, pudieron observar todo lo que había allí y preguntar, y además escucharon un cuento que les narró Emilce... Este fue un día maravilloso, los pequeños se mostraron con mucho interés de aprender, estaban muy atentos a lo que les contaban... No tuve ningún problema, los chicos se portaron de mil maravillas... Llegamos al jardín, y enseguida formamos para irnos a casa...
Así, transcurrió mi primera semana de práctica...
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